TEMPERATURAS DE LA CONVERSACIÓN

             Ahora que los calores de rigor de este mes de Agosto, parece que nos aprietan un poco más, quisiera trasladarles una cuestión acerca de sus conversaciones. Quisiera lanzarle la pregunta: ¿ Cómo son de cálidas sus conversaciones...?. Quizá en un principio pueda sorprenderles, pero si tienen la paciencia suficiente para leer todo este artículo, podrán comprender el fondo de la interrogante.

                Es muy posible que usted haya detectado que hay personas que se muestran “frías” ante el mundo y hay personas que aún, a pesar de haber hablado poco con ellas, transmiten una calidez, una cercanía que hace que nos sintamos más cómodos con ellas. Igual que ya hace tiempo que les planteaba la disyuntiva entre personas “tóxicas” y personas “alimenticias”, también pueden detectarse que hay personas cuya conversación fluye cálida y afectuosa, hay personas que parece que hagan lo que hagan, digan lo que digan son distantes y frías, sea la que sea la situación en la que se encuentren, que son cortas de palabras, como si nada de lo que sucediera pudiera afectarles. Hay personas que nos transmiten la calidez del afecto, de la cercanía, de la comprensión sobre lo que les estamos comunicando.

                Sin duda alguna, esa es una decisión personal, tomada de forma racional, asumidas como un comportamiento, quizá anclado en un pasado, pero desde luego asumido en un presente, tal vez por inercia… por costumbre, pero también como defensa ante una situación que aún sin serlo, pueden detectar como agresiva. Puede ser una forma de tomar distancia, de dejar un espacio en donde cada uno quede en su lugar, pero esta distancia, a menudo es ocupada por un aire frío, por un espacio que no invita a la confidencia.

                ¿ Cómo se muestra a menudo usted: ¿frío?, ¿cálido?, ¿depende en qué ocasiones?, ¿ha aprendido a manejar esta medida de “temperatura” y sabe utilizarla en la media justa de cada momento?, ¿ quizá su relación con algunas personas es premeditadamente fría?, ¿quizá ha utilizado en algún momento ese “clima cálido” para provocar algún acercamiento con personas en las que busca una relación más estrecha, incluso sexual?.

                Por último y lo que, yo creo, que es mucho más importante. ¿Se habla a sí mismo de una forma cálida, de una manera amable, para disculpar sus errores y se felicita afectuosamente, dentro de su discurso personal (que no sordo) por los aciertos realizados, por los éxitos obtenidos, por pequeños que ésos sean…?

NOSTALGIA, NO ES RE-VIVIR, SINO VIVIR OTRA REALIDAD

          Cada vez llevo más tiempo observando el fenómeno de la nostalgia en tiempos que se nos aparecen como de crisis.  Nostalgia entendida en la manera en la que empezamos a sostener que “cualquier tiempo pasado fue mejor…”, nostalgia que provoca la revisión de las antiguas fotografías de la infancia, de la juventud, comenzamos a recordar a compañeros de juegos, que entonces podrían resultarnos odiosos y que vistos desde la actualidad nos resultan como entrañables, como seres queridos que se quedaron en el pasado y que nosotros quisiéramos acercar hasta nuestro presente, con la ingenuidad de encontrarlos con el mismo aspecto, con la misma sensación que nos producía en el pasado, mejor aún, con el producto de imagen que, uniendo el recuerdo con nuestro deseo y una percepción ajustada a nuestro anhelo, nos hace crear una imagen que en muchas de las ocasiones resulta más que decepcionante…

            Nostalgia para retomar recuerdos en forma de imágenes, de objetos, de músicas o películas o libros que admiramos en el pasado y que ahora vemos como insuperables con respecto a las cosas que nos rodean…

          Echamos de menos, vacaciones y trabajos, estudios y labores que en el pasado no pensábamos que fueran tan excitantes, pero que vistas desde la “traición” del recuerdo, nos hace desear volver a ese momento, a ese lugar, a esa experiencia…

          Cuando todo esto nos sucede de una forma más o menos esporádica, no tiene porqué significar mucho más que el recuerdo amable de un pasado que nos pertenece…, pero si esta es una situación habitual, si permanentemente vivimos añorando lo que fuimos, lo que vivimos, lo que pasamos, sin dejar que todo eso sea… lo que es: pasado, entonces podemos estar cayendo en un desprecio por el presente, que realmente no debería de estar justificado. Si en la actualidad somos lo que somos, para bien o para mal, sin duda es a causa de nuestro pasado, de nuestras experiencias vividas y lo que hemos sido capaces de hacer (o no) con todo ese bagaje personal. De manera que si las cosas nos van bien en la actualidad, porqué obsesionarse y centrarse tanto en ese pasado, si lo que tenemos en el presente es satisfactorio, es exitoso en la medida en la que podemos sentirnos más o menos cómodos…

             Pero si las cosas actualmente no nos van tan bien como quisiéramos, quizá no hemos hecho demasiado bien las cosas en el pasado… o al menos, en el espacio en que recordamos con tanto gusto y el momento actual… ¿ Qué fue lo que nos hizo llegar a esta situación actual?, ¿ en qué momento nos desviamos del camino que deseábamos seguir?, ¿ es posible buscar nuevos caminos, nuevas formas para situarnos de nuevo en un estado de felicidad, al menos semejante al que añoramos?, o quizá es que… el pasado no fue tan feliz y el presente tampoco es tan terrible, como nos puede parecer…
¿Quizá es que es más cómodo, más gratificante e inmediato, el refugiarnos en el pasado que enfrentarnos a este presente….? Al fin y al cabo, el pasado, no requiere más esfuerzo que el del recuerdo ( más o menos veraz…) siempre que no entre en contradicción con la experiencia compartida por alguien que tenemos cerca y que puede corregir nuestras percepciones con lo que son las suyas propias…

              Probablemente hayan vivido en primera persona o hayan conocido a personas que cuando recuerdan sucesos compartidos, no se llegan a poner de acuerdo sobre lo sucedido, sobre la percepción y el recuerdo que cada uno tiene, es habitual que no se lleguen a poner de acuerdo ni tan siquiera en las fechas, en los lugares, en datos, que deberían ser solo datos, sin mayor carga emocional…, pero es así, sucede cada día en muchos matrimonios, no parece que realmente hubieran vivido juntos esas experiencias….

               Tal vez si el presente no nos resulta lo importante que realmente es, sea porque no somos capaces de ver las cosas buenas que cada día nos suceden, no somos capaces de reconocer que en el presente podemos aplicar muchas de las cosas que disfrutábamos en el pasado, pero mejoradas por la “técnica”, por las posibilidades actuales… Saber adaptarse a las nuevas situaciones, saber aprovechar estas ventajas, ser flexibles y generosos con nuestro propio presente, puede ser una de las herramientas más poderosas para poder salirnos de ese estado nostálgico que nos resulte dañino.
Mucho mejor que dejarnos llevar por la nostalgia, por la “saudade” gallega, es utilizar los momentos felices vividos, para hacernos más fuertes, hacernos comprender que si fuimos capaces de crear esas situaciones de placer, siempre podremos volver a crearlas en el momento actual, siempre tendremos además el conocimiento, la experiencia, la práctica, para poder ponerlas de nuevo “en práctica” y avanzar en un camino que nos lleve hasta una realidad mucho mejor, tanto para nosotros mismos como para nuestro entorno más cercano…

              No conviertan lo que es una “grandeza”, el recuerdo propio, por una “excusa” para mantenernos 
en la pasividad, tóxica y paralizante de no querer enfrentar los retos del presente…

LOS AÑOS PUEDEN SER UN GALARDÓN

           Chavela es un ejemplo de cómo los que ahora llaman “de edad avanzada”, pueden hacer todavía mucho, pueden continuar creando llegados a más de los 90 y demostrando lo que la trayectoria personal ha ido acumulando en el vagaje individual de cada uno.

          Cuando el cerebro y las fuerzas acompañan ( o al menos el cerebro) no existe impedimento o dificultad que pueda frenar lo que se lleva dentro y se quiere compartir con su entorno. Aunque Chavela puede que no sea uno de los mejores ejemplos de vida que se puedan encontrar ( bebedora empedernida hasta la exageración, pistolera y “brabucona”).Sí que me parece un buen ejemplo de sinceridad a lo largo de toda su vida, “ siempre he vivido y dicho lo que me daba la gana”, uno tiene la impresión que no siempre “ha vivido” lo que le daba la gana. Las enfermedades como su ceguera, como la poliomielitis que le obligaba a caminar con aparatos ortopédicos ( aparatos de los años 30, claro…), como el profundo y doloroso proceso de desintoxicación alcohólica, son situaciones que si no pueden con uno… lo acaban por hacer más fuerte, más humano, más cercano al sentir y dolerse de las personas.

              La enfermedad, el dolor, la muerte, son de esas circunstancias que unifican el sentir de la humanidad, a pesar de que cada persona maneja estas situaciones y las enclava en su situación personal de una manera propia, individualizada y evolucionable…

              He querido aprovechar el ejemplo de esta mujer fuerte y a su vez, con una apariencia de tanta fragilidad, tan covijada en su jorongo, tan interiorizada aunque estuviera cantando para miles de personas en directo, hacía que cada uno de los oyentes reviviera sus propias historias, su propia experiencia, sus propios amores (fueran del sexo que fueran), sus propias amarguras, que en el fondo son las amarguras y los sentimientos compartidos de uno a otro continente, de uno a otro idioma… Cuenta Chavela, que cuando estuvo actuando en el mítico Teatro Olympia de París, viéndola , su embajador, Almodóvar y la actriz francesa Jeanne Moreau, quien no sabía hablar español pero le dijo a Almodóvar: «No hace falta que me traduzcas lo que canta, porque la entiendo perfectamente».

                Es el coraje de sobrevivir para aportar algo de interés, la mentalidad de quien se presenta ante un posible trabajo con la frase: “No vengo a ver si puedo, porque puedo… vengo”, quien nos deja una profunda huella, de las cosas que no se aprenden en los libros, ahora en los blogs, sino en la calle, en la convivencia con todas las clases de personas y uno sigue siendo el mismo. Ojalá que puedan tener presentes (como me ha ocurrido a mí, a lo largo de décadas) su mensaje de vida, su consuelo y su fuerza para salir adelante…

CHAVELA VARGAS SE NOS QUEDÓ ETERNAMENTE

No vengo a ver si puedo, porque puedo… vengo. Así se presentaba Chavela Vargas a uno de los propietarios de la sala El Hábito de Coyoacán, para poder cantar en su establecimiento.
El pasado día 5 de agosto, falleció en la ciudad de México a la edad de 93 años, María Isabel Anita Carmen de Jesús Vargas Lizano: “Chavela Vargas”.
Chavela pasó por una dura enfermedad en sus ojos “estuvieron a punto de resecárselos con nitrato de plata”, los chamanes de México consiguieron recuperar en parte su visión, al igual que consiguieron recuperarla de una poliomielitis y a su vez la convirtieron también en “chamana” y protectora de los pueblos indígenas de México.
Puede ser un buen ejemplo de fortaleza, de lucha y esfuerzo por salir adelante.
Chavela nació en una familia humilde de San Joaquín de Flores, Costa Rica, después de una infancia que describe como muy poco feliz, sus padres se desentendieron de ella y queda a cargo de sus tíos “que Dios los tenga en el infierno”, según sus propias palabras.
Con 17 años se traslada a México y mutuamente se adoptan como “padre e hija”, en donde ya se queda a vivir por más de 70 años, con idas y venidas prácticamente por todo el mundo, a pesar de su relación agridulce con México, prohibida en las televisiones y radio del país, pero reconocida en Acapulco, aplaudida en el Olympia de París y con una buena parte de México recorrido con su voz rota por el alcohol y la vida, ya en el 2009 fue reconocida como “Ciudadana distinguida de la Ciudad de México”.
Se retiró hacia los años setenta, entre otros avatares personales, por sus graves problemas con el alcoholismo, su amigo José Alfredo Jiménez en una ocasión le calculó que se habría bebido más de 40.000 litros de tequila y una vez “superados” regresó a los escenarios en 1991. Con más de 70 años, se convierte en todo un icono con su jorongo como casulla para el ceremonial del escenario en donde desgarra temas propios y ajenos, que no extraños.

Fué entonces cuando los reconocimientos se hicieron más patentes, viaja a España, de la mano de Pedro Almodóvar y en el 2000, el entonces presidente del gobierno español, Jose Mª Aznar, le entrega la Gran Cruz de Isabel la Católica en Madrid. Se llenó las manos con el Grammy latino que consiguió en el 2007, medalla de oro de la Universidad Complutense de Madrid, del mérito por la Universidad de Alcalá de Henares y “Huésped de Honor de Buenos Aires”, hacen junto a sus más de 80 discos grabados (el primero en 1961 y el último con poemas de Federico García Lorca, en el 2012) una de las personalidades del mundo hispano de la música imprescindibles para conocer lo que han sido estos últimos 80 años en la música y el sentimiento de millones de personas que se encontraban ( nos encontrábamos) unidos, de alguna forma, cobijados y compenetrados cuando las cosas no iban del todo bien y cuando había que entonar una ranchera para celebrar que la vida nos comunicaba a todos los que su música se hizo parte de nuestra vida. Participó en varias películas: Grito de Piedra, del director Wener Hergoz, Frida de Julie Taymor, Babel de Alejandro González Iñarritu y su buen amigo Pedro Almodóvar incluyó su tema Piensa en mí, al que Luz Casal le pusiera la voz para la película Tacones lejanos y Joaquín Sabina compuso en su honor el popular “Por el bulevar de los sueños rotos”, con el que compartiría varios conciertos por toda España, junto a otros muchos cantantes de la talla de Víctor Manuel, Lucrecia…

Su última visita a España fue el pasado 11 de julio, para despedirse de sus amigos, de España y de su querido García Lorca, presentado en la Residencia de estudiantes de Madrid su audio-libro “Luna-Grande” reviviendo a modo de homenaje, algunos de sus mejores poemas, junto a sus grandes éxitos. Todo un éxito y un gran esfuerzo que provocó incluso su hospitalización, para recuperarse de la fatiga y poder regresar a México, en donde quería morir, como así fue.
Chavela, como tantas y tantos otros nos han ido mostrando y acompañando en un camino en el que aún seguimos….

DE NUEVO, A SU DISPOSICIÓN….

Retomo desde este espacio que creé, hace ya varios años y que por unas circunstancias o por otras, se ha ido quedando esperando en silencio, como un viejo amigo al que desde hace tanto tiempo que no visitas, que los últimos aconteceres pierden interés para dejar hueco a lo realmente importante. Como esos amigos que se acercan en este tiempo de estío.
Retomo un espacio propio, que solo yo controlo, que me permite dejar abiertas las puertas de par en par, para recibir y responder si alguno de ustedes quisiera dejar “huella”. Y cumplo así mi promesa, de utilizar un nuevo vehículo de comunicación con Ustedes.
Si es verdad que un Coach, puede entenderse como un artesano de herramientas, como un lutier de instrumentos musicales, trataré de proporcionarles algunas herramientas que me hayan parecido útiles, algunas ya contrastadas, comprobadas y vividas. Algunas de ellas se las brindaré para su propio experimento, para su propio uso personal, como el médico que receta, sin tener necesidad alguna de haber probado personalmente cada medicamento. A menudo, avisaré de si es ya experimentada y en otras cosas, me temo que mi propia privacidad, mi propio pudor me hará evitarlo. Entre otras cosas, porque es absolutamente independiente el que en mi persona haya funcionado o no y no guarda relación con la experiencia que puedan ustedes mismos vivir.

Trataré de hacerles propuestas, pequeños “utensilios” con los que ustedes mismos, siguiendo su propia experiencia, con su propia intuición, con la argamasa con la que la vida nos ha ido dotando, le den forma y acomodo a su circunstancia personal.

En definitiva, se trata y eso siempre lo tomaré como un axioma ( hasta ahora válido también para mí) que ustedes sean más felices cada día y consigan que a su alrededor ese mismo estado se contagie y agrande, si fuera posible, aún más y mejor.

Necesitamos ya con urgencia, muchos más cooperantes, que desesperantes desesperados, optimistas que desilusionados de todo… porque esa parece que ahora, es la corriente… No se dejen llevar, sonrían a lo único importante y definitivo.

Seguimos vivos, porque nos pensamos, no solo porque respiramos..