Hace bastante tiempo, que quería
presentarles a un ser excepcional, quería aprovechar su existencia, para
compartir con todo ustedes la reafirmación sobre las enormes posibilidades del
ser humano, reafirmar la grandeza del Hombre, que tan a menudo tenemos la
sensación de estar devaluado, por poner solo nuestro objetivo en las flaquezas
y bajezas con las que nos bombardean diariamente y quizá por pereza asumimos
como válidas.
Daniel Kish, nació en 1966 en
Montebello – California- con un cáncer de retina y le tuvieron que extirpar los
dos ojos cuando aún no tenía 13 meses. Un tiempo después empezó a emitir
chasquidos con la lengua, sonidos que parecían ayudarlo a localizar el entorno
en el que se encontraba y así moverse de una manera más segura, más estable que
cualquier otra persona con ceguera. Aprendió a gestionar la “ecolocalización”: sistema por el que con cada chasquido, produce
ondas sonoras que rebotan en las superficies que nos rodean y que vuelven a sus
oídos como un eco débil, para que el cerebro procese estos ecos y los convierta
en imágenes, pero no imágenes fijas, estáticas, como fotografías, sino imágenes
dinámicas, tridimensionales. Daniel lo define como “una conversación con el
entorno”. Cada chasquido es como un “flash” tenue de una cámara. Daniel
consigue crear imágenes de lo que le rodea en un radio de decenas de metros. “..
soy capaz de detectar un poste de un par de centímetros de grosor. A cinco metros, reconozco coches y
arbustos. Las casas las localizo a 50 metros …”.


Por último, la revista americana
Utne Reader, lo ha seleccionado entre los “50 visionarios que están cambiando
el mundo”. Cariñosamente, lo llaman… “El hombre murciélago”.
Tal vez,
la próxima vez que por su cerebro pase la idea del “no puedo…”, “es imposible…”,
chasquee su propia lengua, recuerde el nombre de Daniel Kish y repítase… él lo
tiene mucho más complicado y …. ¡ puede…!
Vídeo con subtítulos en castellano, si no los ve, actívelo desde la barra de activación
No hay comentarios:
Publicar un comentario